Desde hace unos años, el altruismo parece ser el contrapunto al
modelo social individualista predominante. Son muchas las personas que cada día
ofrecen su tiempo gratuitamente en alguna de las muchas organizaciones no
gubernamentales que existen. Hoy queremos conocer más profundamente una
agrupación de las más consolidadas y conocidas de nuestra localidad, Cáritas, y
pretendemos hacerlo de la mano de la Coordinadora
Interparroquial , Encarna Grau.
Buenas tardes Encarna. En primer lugar ¿Qué es Cáritas y en
qué se diferencia de ONG’s y otro tipo de organizaciones de carácter benéfico?
Buenas tardes. Si nos remitimos a los Estatutos de Cáritas,
se define cómo “el organismo instituido para expresar la solicitud de la
iglesia por los necesitados y favorecer la fraternidad humana a fin de que se
muestre, con obras y palabras, el amor de Cristo”. Esta perspectiva de la caridad permite contemplar en
plenitud la virtud caritativa, pues su último fin sobrepasa en mucho a la
expresión de un sentimiento paternalista, o la limosna. No es posible contener
algo tan grande con ideales tan minúsculos. La caridad fraterna en cambio,
pretende impulsar la promoción integral de la persona desfavorecida, pues como
hermano nuestro así ha de ser porque así le pertenece.
Podríamos decir entonces que el elemento diferenciador
es la caridad fraterna. ¿Podría explicar en qué consiste?
La caridad fraterna sólo puede estar presente desde el
pleno convencimiento de que a toda persona humana le asisten los mismos
derechos, por el mero hecho de serlo y por tanto, legítimamente le corresponden
todos los privilegios y dignidad de trato, sea esta persona quien sea, ostente
el lugar social que ostente, sea cual sea su raza, religión, pueblo, sexo,
edad, profesión, estatus, nivel académico o cualquier otra circunstancia en la
que se encuentre en el presente, se haya encontrado en el pasado o sea
previsible que se encuentre en el futuro. Dicho de otro modo: todo hombre es
igual a otro hombre; y ambos son hijos de Dios. Sin más…
¿Cómo materializa todo esto Cáritas en el día a día?
Nuestra misión es acompañar a las personas, promover
en ellas un crecimiento integral, y dotarles
de espacios de esperanza allá donde se ha instalado el desanimo y en muchos
casos la desesperación, respetando sus ritmos de cambio y recordándoles que son
ellos los protagonistas de su vida. En ocasiones esto resulta difícil de entender,
sobre todo a los propios usuarios, y es normal. Es comprensible que ante
episodios vitales altamente estresantes y críticos, se sientan sin fuerzas, desorientados,
convencidos de no poder seguir y buscan que alguien les proporcione una
solución rápida a sus problemas. Pero eso no suele arreglar nada, o casi nada.
Por supuesto que se les presta ayuda material sí es necesario, pero no solo. Recurriendo
al conocido tópico “No únicamente damos el pez, preferimos enseñarles a pescar”
y además les proponemos acompañarles en la búsqueda de aguas menos turbulentas
de las que normalmente conocen. A su vez, también luchamos por concienciar a la
sociedad sobre temas como: comercio justo, derechos básicos de las personas,
conducta solidaria,…, para que todos juntos construyamos un mundo más justo,
fraterno y solidario.
¿Es este un momento especialmente difícil?
Este es “nuestro momento”, el que nos ha tocado vivir.
No me atrevo a decir que sea especialmente difícil cuando si miramos a nuestro
alrededor hay tanto sufrimiento en tantos lugares a causa de guerras, hambrunas,
políticas inadecuadas, etc. pero tampoco puedo negar la apremiante necesidad de
cambiar las cosas. La pobreza humana no es un escenario nuevo, ciertamente ha
estado siempre presente y muy probablemente continúe estando, pero existe en
este momento la urgencia de promover un cambio de paradigma en conceptos como la
solidaridad y la caridad, o la denuncia del agravamiento del ya dramático
contraste entre la riqueza -de unos pocos- y la pobreza -de tantos-, o que ni
siquiera tener un puesto de trabajo garantice poder cubrir las necesidades
básicas mínimas, mientras que paradójicamente hay excedentes de recursos en el mundo suficientes para acabar con la pobreza.
Cáritas en Cullera mantiene un nivel de actividad
bastante elevado ¿Cómo se consigue?
Si, tenemos bastante actividad. Tenemos programas de
infancia y familia, de acompañamiento en la búsqueda de empleo, economato,
ropero, atención psicológica, animación y concienciación comunitaria, atención
personalizada en la acogida parroquial de cada parroquia... Esto se consigue
gracias a los voluntarios, colaboradores, socios, donantes,… contamos con ayuda
técnica de Cáritas Diocesana y el apoyo incondicional de los párrocos de las
cuatro parroquias que entre otras cosas, nos ceden los locales parroquiales.
Creo que es importante mencionar que en nuestra diócesis somos más de 5.000
voluntarios y voluntarias que y ello
permite que se este desarrollando numerosas acciones a favor de las
personas necesitadas y excluidas.
¿Cuál sería el perfil del voluntario de Cáritas?
No hay un prototipo de “voluntario
ideal”. No se piden cualidades extraordinarias, ni ningún otro requisito específico.
Solamente que sean personas comprometidas, y que entiendan que se unen a una entidad que pertenece y que esta en plena
comunión con la Iglesia Católica
de la cual forma parte. El modelo de conducta que nos inspira es Jesucristo y
sus enseñanzas evangélicas son nuestro cuaderno de viaje.
¿Es ser creyente la única condición?
Digamos que es un pilar esencial,
pues ineludiblemente la expresión del amor fraterno, crece en firmeza cuando
esta fundamentado en la Fe.
Pero también es cierto que puede darse el proceso inverso,
que la Fe se
descubra y brote con el ejercicio de la caridad. Decía Benedicto XVI en su
libro “La Sal de la Tierra ” qué hay tantos
caminos para llegar a Dios como hombres, luego al descartar a alguien por no
ser creyente existe el peligro de dificultar el acceso a descubrir a Cristo y podríamos
obstaculizar la obra misionera de la iglesia en lugar de facilitarla, por ello
siempre que la persona en cuestión acepte formar parte de Cáritas después de
conocer cual es nuestra esencia, podría ser voluntario. En los últimos tiempos, y por ese motivo, sí ponemos un primer requisito necesario: que se realice el curso básico de
voluntariado. Este curso es como la presentación en unas pocas sesiones de todo
lo que hacemos, cómo lo hacemos y por qué lo hacemos, y proporciona a los
futuros voluntarios un conocimiento de Cáritas que les permite tomar la
decisión de formar o no parte del voluntariado de una forma consistente con sus
convicciones.
¿Y si deciden quedarse…?
Entonces se incorporan a uno de los proyectos:
al más afín a sus conocimientos, aquel cuyo horario se ajuste mejor a sus disponibilidades
o cualquier otro motivo. Pasará a formar parte de un equipo de voluntariado y
tendrá derecho a formación continua y gratuita. Cáritas periódicamente organiza
cursos gratuitos con los que pretende dotar a sus voluntarios de todos los
instrumentos necesarios para una atención al usuario de calidad y dar una adecuada
respuesta a las necesidades. Desde el año
1984 Cáritas Diocesana de Valencia ha formado a más de 5.000 personas, de
manera ininterrumpida.
Se forman, se incorporan y… ¿Cuáles son sus retos?
Tenemos muchos. Cada atención personal supone un nuevo reto a
asumir, pero por comentar uno me referiré a la Denuncia Profética.
Si nos ponemos en el lugar de los más desfavorecidos, los excluidos, los “descartables”…,
entenderemos la necesidad de alzar firmemente la voz para exigir criterios de
actuación, políticas y compromisos de búsqueda de soluciones absolutamente
necesarios. Una de las misiones de Cáritas es evidenciar las injusticias, apremiar
cambios a las administraciones, los legisladores y los que ostentan el poder
económico. El modelo económico de la explotación y el empobrecimiento de los
más débiles, políticas sociales restrictivas de derechos básicos que están
instalándose hasta “normalizar” acciones que son absolutamente“anormales” y que
en demasiadas ocasiones empujan a las personas irremediablemente a la exclusión
social y empobrecimiento…. De hecho, una de las conclusiones de la última
asamblea general de Cáritas expresa como uno de los compromisos para este año,
seguir “denunciando la permanencia de unas estructuras económicas y sociales
injustas, que son responsables del sufrimiento de millones de personas y
familias en nuestro país”.
Esta denuncia ¿enfrenta directamente Cáritas con los poderes políticos?
No debería, puesto que Cáritas nunca
busca un enfrentamiento, lo que siempre pretende es poner en valor la voz de
aquellos a los que nadie escucha. Los poderes políticos son los que tienen la
posibilidad y por tanto, la responsabilidad de promover políticas y leyes que
resguarden y protejan a los ciudadanos de su país. Deben crear redes
asistenciales suficientes y dignas, así como la obligación de proteger a
aquellas personas que necesitan ser ayudadas por la razón que sea. Deben garantizar
y promover las condiciones necesarias para el acceso de las personas a los
derechos económico-sociales que les pertenecen, como son un empleo digno, una
vivienda adecuada, el cuidado de la salud y una educación en igualdad y
libertad. Todos y cada uno de ellos presentes en nuestra Constitución. Así como
velar por la aplicación de todos aquellos derechos reconocidos en la
Declaración Universal de Derechos Humanos, al que nuestro país esta adherido desde
hace muchas décadas.
Si las actuaciones políticas no
cumplen su finalidad, incluso, se revierte buscando el beneficio de unos pocos mediante
el detrimento de muchos; cuando los garantes del bienestar de los más débiles
no ejercen su cometido como deberían hacerlo, alguien ha de alzar la voz y
evidentemente pueden darse ciertas tensiones. Pero repito de nuevo, nuestro
objetivo nunca es el enfrentamiento, sino la defensa de los derechos de los
débiles y excluidos.
A nivel local se están produciendo de
un tiempo a esta parte actuaciones, como recogidas de alimentos etc., por parte
de partidos políticos y que muchas veces
se publicitan como actividades organizadas
conjuntamente con Cáritas ¿Existe realmente esta cordialidad entre las
formaciones políticas locales y Cáritas Cullera?
Esta respuesta necesita abordar
varios puntos. Cáritas Cullera mantiene una fluida relación con Servicios
Sociales del MIA por razones obvias, y con otros departamentos u organismos gubernamentales
locales de forma más o menos puntual. Pensamos que aunque la obligatoriedad
asistencial reside en la administración, y dado que la situación económica actual
nos obliga a sobrepasar en muchas ocasiones el ámbito de trabajo propio de
Cáritas que es la acción subsidiaria del estado; la comunicación entre
trabajadores sociales y Cáritas es esencial para coordinar las actuaciones.
Esta relación siempre ha sido cordial y fluida y es altamente previsible que
así continuara. Ese es nuestro más sincero deseo.
En cuanto a los partidos políticos
pienso que la nuestra es la única relación posible entre un colectivo apolítico
perteneciente a la Iglesia Católica
y que trabaja buscando el bien del más desfavorecido, y las personas que a
nivel local han logrado ocupar los puestos de máxima responsabilidad de
gobierno o aspiran a hacerlo en el futuro. Una cordial relación basada en el respeto
mutuo y máxima educación.
Es cierto que en prensa se han publicado
fotografías de las entregas efectuadas en nuestras dependencias de productos
recogidos en las diversas campañas llevadas a cabo por organizaciones de
carácter político, incluso pueden aparecer en el futuro algunas más, al haber
en estos momentos acciones que están aún en marcha, pero es necesario aclarar
que Cáritas Cullera no organiza ningún tipo de actividad conjunta con nadie a
no ser que así se publicite expresamente por su parte.
En Cáritas se recibe gustosamente a
todas las organizaciones, colectivos, asociaciones o particulares que han
tenido la bondad de organizar un evento solidario a favor de nuestra entidad o
deseen algún tipo de contacto con nosotros.
A todos queremos dar las gracias por estos actos en nombre de los
miembros más destacados de Cáritas, los beneficiarios de estas acciones. Continuamente
se realizan este tipo de fotografías: escolares en el economato, visitas concertadas
o acciones realizadas por colectivos…. Esto no significa que hayamos
programando conjuntamente ninguna de ellas, ¡por supuesto que no!
Mantenemos la misma relación cordial
con todos y cada uno de los partidos políticos que están en el gobierno, los
que aspiran a estar en el futuro o los
que han estado en el pasado, pero es necesario señalar que durante todos estos
años Cáritas se ha mantenido siempre al margen de colores políticos, de
afiliaciones, de razas, nacionalidades y de cualquier otro tipo de
clasificaciones. Así ha sido y así continuara siendo. Es más, nuestro más intimo deseo es
que este tipo de actos, incluso nosotros mismos, dejásemos de tener sentido en
nuestra sociedad, pues las políticas sociales alcanzaran el grado de
competencia optimo y garantizase una
vida digna a las personas que hoy necesitan ser atendidas para poder subsistir.
Animamos a nuestros políticos a que trabajen en ello, convencidos de que
nuestro deseo y el suyo es el mismo.