El pasado sábado 22 de Marzo se realizo la 1ª
Convivencia de voluntarios de Cáritas de Cullera. El encuentro tuvo lugar en el
Salón de Actos del Colegio de la Inmaculada Concepción de Cullera gracias a la
generosa contribución de su directora Dª Mª Teresa Ferrer, que nos cedió las
instalaciones y nos proporcionó toda clase de facilidades.
Comenzó a las nueve y media de la mañana
poniéndonos en primer lugar de cara al Señor con la oración que Dº Diego
Ferrandiz dirigió, para dar paso posteriormente
a una mesa redonda en la que los responsables de los diferentes programas
activos en estos momentos de Cáritas en
nuestra ciudad hicieron una breve descripción de los mismos, informando a los
allí presentes del trabajo que en cada programa se realiza y aportando datos,
como por ejemplo, a qué tipo de usuario esta destinado, el lugar donde se
llevan a cabo, qué horario tiene cada
uno y cuál es la vía de acceso que han de seguir los usuarios para llegar a
participar y por tanto a beneficiarse de ellos.
Los programas que se presentaron fueron: Economato,
Maná, Ropero Solidario, Sirio, Escoleta, FemArt, Atención Psicológica, Cronista
(Novedad), y un nuevo proyecto que está en fases muy iniciales de formalización
y que consiste en un grupo de trabajo dedicado a la ayuda y formación en
técnicas de búsqueda de empleo.
Al terminar la rueda de presentaciones se dio voz a
los voluntarios que en ese momento formaban la audiencia en un turno de
preguntas dirigidas a los miembros de la
mesa que sirvió para aclarar puntos y definir conceptos que hubiesen podido
quedar confusos.
La segunda parte del acto estuvo a cargo de la
Coordinadora de la Vicaria, Montse Alberola, que nos presento en una charla con
apoyo multimedia la campaña institucional de Cáritas para este curso 2013-2014
y que lleva el lema “Vive sencillamente
para que otros, sencillamente puedan vivir”. De forma amena, Montse nos
habló de las directrices que deben de guiar la labor de cada uno de los
voluntarios que formamos parte de Cáritas, ya que nuestra labor no es una suma
de individualidades sino un trabajo de equipo que se enfoca a una meta común,
preservar y promocionar la dignidad de cada una de las personas que acuden a
nosotros, sea cual sea su circunstancia.
La jornada concluyo con una comida de fraternidad
en la que reino la armonía y el ambiente festivo. La valoración de esta primera
jornada de convivencia por parte de los asistentes ha sido altamente positiva y
el grado de fraternidad que se produjo entre los voluntarios de los diferentes
programas de Cáritas dejo un dulce sabor de boca en todos ellos hasta el punto
que todos hicieron la misma demanda, “esto debe repetirse”.
Pediremos al Señor
que así sea.